Las chicas sin suerte

Por primera vez dejas de esperar a la suerte, dejas de esperar a que la vida te haga un regalo. Y desde que aprendes a luchar por lo que queres algo cambia y dejas de esperar una limosna de la vida. Ahora vos haces tú suerte. Las chicas sin suerte siempre somos espectadoras nunca protagonistas, pero ser espectadora o protagonista depende solo de una decisión. A las chicas sin suerte nunca nos dan un protagonismo siempre somos nosotras las que tenemos que ir pararnos en el centro del escenario bajo la luz y decir "Acá estoy”. Las chicas sin suerte vivimos lamentándonos lo que nos tocó en suerte, pero cuando nos revelamos, cuando agarramos al toro por las astas algo dice “No” .Las chicas sin suerte creemos que somos como una valsa en el mar a la deriva, pero podemos nadar, podemos patalear, remar. Está bien tenemos que remar mucho si, pero remando llegamos a donde nosotras queremos. No a donde el mar nos lleva.Hay chicas que son amadas con tan solo existir en cambio otras tenemos que remar y remar para que nos miren un poco. La suerte de la fea, la linda la desea. Pero la fea no tiene suerte tiene actitud, ella sabe hacer su propia suerte. Porque es así los que no tenemos suerte, tenemos que ser prepotentes estirar la mano y agarrar lo que la vida nos mezquina.